REFLEXIONES
Autor: Alejandro Vargas
El momento presente se extiende como una suave ola que nunca termina, deje yo que su luz me inunde, que sus doradas aguas me empapen y mojen mis vestiduras hasta deshacerlas completamente.
¿Miro el espejo y pregunto, quién es?, ¿de quién es el reflejo que devuelve el espejo? veo condicionamientos.
Una historia personal que se disuelve en el vacío. La nada vertiéndose en el silencio.
Desde la profundidad del silencio observo los movimientos complejos de la mente, sus apasionadas
discusiones, sus apegos, sus incontrolables deseos proyectándose como fantasmas en el tiempo, la
energía que se consume en si misma y desaparece, si solo la observo, es como el chisporroteo de un volcán que pronto se apaga, consumida su fuerza.
Oh mente, poderosa herramienta que permite discernir y comprender el mundo que me rodea, mientras te mantienes humilde herramienta eres la mas poderosa en mis manos que te usan desde la profundidad del silencio, desde la gran quietud.
Oh silencio, eres la presencia pura, la comprensión pura, desde la profundidad de tu vacío lo llenas todo de gran sentido.
Hasta la humilde oficina desprovista de todo adorno se transforma luminosa y la calle
bulliciosa de pronto esta llena de seres de luz.
Un día sin meditar es un día perdido, es un día de vagar por los pasadizos oscuros de la mente que gobierna sin saber de su condicionamiento, un día sin meditar es un día de cargar cadenas, de reaccionar gobernado por las fuerzas ancestrales sin saber ni cómo ni por qué.
Cuan diferente es
gobernar desde el silencio, estar de pie humilde y rendido en el puente de mando con la poderosa vara mágica del abandono en la mano, con los ojos abiertos y la mente tranquila.
Desde la profundidad del silencio mantengo el equilibrio y no desmayo, la inquietud le dice al silencio, no soy tu, y se hace a un lado, la tendencia le dice al silencio, no puedo contigo y se hace a un lado para sumergirse en el como en un lago de aguas tranquilas en las que desaparecer completamente.
La queja intenta un argumento, pero en la profundidad del silencio se deshace, se hace a un lado y se transforma en tierra fértil.
El desasosiego intenta su truco frente al silencio, pero la vasta soledad y el desamparo
del silencio sin limites lo anonada, y también el se hace a un lado humildemente y proclama: Oh
profundidad del silencio, solo tu eres, y nosotros, los movimientos de la mente no somo sino una brisa que el calor de tu verano evapora y transforma en nada.
Amigos queridos, viejos hábitos mentales, como ropas muy usadas, como viejas y gastadas por el paso del tiempo, como rebosan mis roperos de estos trajes intercambiables y que inútiles son ya para mi alma vestida de silencio.
Ahora me puedo pasear casi desnudo, vestido solamente con una sonrisa leve
de abandono total, de rendición y de confianza.
Del silencio al silencio mi alma desnuda se pasea por la
vida sin tiempo, sin esperanza, sin anhelo, como una pura presencia vacía de expectativas y de sueños.
Cuando me vence el sueño la mente se pierde en la inconsciencia, por unos minutos el discurso se
interrumpe hasta que de pronto la mente retoma su cadena de identificaciones y dice, vamos de regreso a ser quienes somos, a sentir como sentimos a actuar como actuamos, volvamos rápido a nuestras cadenas, nuestros queridos condicionamientos.
Entonces desde el profundo silencio el ser responde sinpalabras, abriendo el caudal de la conciencia como el de un rio impetuoso que arrastra todos los sueños y en un instante restituye el orden y el vacío.