“Para que una taza se vuelva a llenar debe estar vacía”
Jorge bucarey
Cuando pensamos en alimentación casi siempre estamos pensando en nuestro cuerpo y los alimentos que consumimos para saciar el hambre en el cotidiano.
Pero ¿qué pasaría si descubriéramos que la alimentación es mucho mas que lo que vamos a comer al almuerzo, en la cena y en el desayuno?
Si bien podemos mencionar algunos alimentos esenciales para el buen funcionamiento del cuerpo humano como por ejemplo los cereales, las semillas, las frutas, las verduras, el agua, las hierbas. Todo lo que nuestro padre sol y nuestra madre tierra nos entregan.
El ejercicio físico también.
¿Pero por que necesitamos que nuestro cuerpo funcione bien?, ¿es solo cosa de salud?
¿O es en nuestro cuerpo donde debemos mantener la atención para que este nos entregue su mejor potencial?
Cuando damos un sentido a nuestra vida y ese sentido comienza a relacionarse con el ser, la alimentación tiene un significado mucho más amplio que eso.
Alimentación es todo lo que entrego no tan solo a mi cuerpo sino también a mi mente y a mi alma
Alimentación es lo que consumo a través de los 5 sentidos de la percepción, cuando miramos programas de televisión de contenidos violentos o de terror, cuando comenzamos a tener un estilo de vida con largas jornadas laborales, cuando tenemos un rol de mujer maravilla o super hombre.
Es importante darnos cuenta de cómo todas las cosas que hacemos en nuestra vida influye en nuestra mente. A pesar de que tengamos una alimentación muy saludable en cuanto a los tipos de alimentos que comemos, es también importante dar una mirada a nuestra mente y explorar los pensamientos a evaluar el tipo de lenguaje que ocupamos para desarrollar nuestras conversaciones. Esta mirada nos irá mostrando un amplio camino para reconocernos fuera del límite de nuestras creencias y condicionamientos.
Respirar en calma permitir que el aire ingrese a tus pulmones es la forma mas pura de oxigenar nuestro cuerpo, sentir los olores y aromas de la vida misma, de la tierra húmeda, de las flores. Sentirnos a nosotros mismos como seres en vibración.
A través del oído podemos escuchar el sonido del aire, el canto de los pájaros, hermosa música que amplía nuestros sentidos. Eso es lo que hace estar en escucha activa, permanentemente nos permite oír nuestros pensamientos y ejercer la voluntad de orientarnos hacia una saludable visión perceptual.
Con nuestros ojos no tan solo podemos ver la hermosa luz del día, sino que también podemos observar nuestras intenciones como dijo el maestro Jesús “mira primero la viga que esta en tu ojo antes de mirar la paja en el ojo ajeno”
En el gusto podemos reconocer cuáles son nuestras preferencias que estamos dejando entrar en nuestra vida através de hábitos saludables o tóxicos.
El tacto es esa capacidad casi indescriptible que tenemos para darle sentido a las formas. El tacto nos ayuda a desarrollar esa sensibilidad por la vida.
Como ya podemos ver tenemos una idea de como dar una mejor alimentación a nuestro cuerpo y mente, pero ¿y como alimentamos nuestra alma?
Si mi propósito de vida es ir al encuentro con lo divino es esencial que nuestra alma se encuentre pura. ¿Cómo podemos llegar a tener una comunión con lo humano y lo divino desde el alma?
¿Podríamos tener un encuentro desde el alma si nutrimos nuestro cuerpo y nuestra mente de forma tóxica, desinteresada o descuidada?
Es necesario desarrollar esta conciencia. Como seres dotados de libre albedrío tenemos la capacidad de elegir: cada día es una nueva oportunidad.
Y entonces nos preguntamos ¿qué hacemos ahora con todo lo que creemos que hicimos mal, con todo lo que pasó ayer? Para lo único que nos debe importar lo que paso ayer es para hacer mejor las cosas hoy.
Para hacer completa una alimentación con sentido es necesario abandonar la tristeza, la ira, el miedo, la frustración, el egoísmo, y todo lo que consideremos que no nos permita vivir en un estado de calma, de paz, de tranquilidad.
“Un fiel de Jesús pregunto Maestro y como se sana el alma
Jesús Respondió Perdonando”
Cuando nos sentimos desalentados o débiles mentalmente o desequilibrados en cuanto a nuestra alimentación, nuestra alma se siente atrapada como en una tela de arañas (así lo imagino) no puede proyectar su luz porque está mal alimentada.
Completamos nuestra alimentación con sentido cuando somos capaces de regalarnos momentos con nosotros mismos, sonreír ante el espejo, decirnos a nosotros mismo: “te amo”. Emplear nuestros sentidos de percepción en ver cada día como un regalo hermoso, los colores, la naturaleza, el aire y todo lo que signifique haber despertado en nuestro amado planeta tierra, iluminado por nuestra Padre sol y madre Luna, haber despertado lo queramos o no, para dejar una huella. Depende de cada uno qué significado le quera dar a su huella.
Autora: Karen Navarrete Orellana.
Cafh, Chile